Existen algunos indicadores que deben de poner sobre aviso a los propietarios que quieran alquilar su vivienda. La experiencia nos dice que el perfil de inquilino «normal» (Es decir, el que paga y no causa daños) actúa de forma bastante predecible, por lo que existen unos elementos comunes que pueden ser indicativos de encontrarnos ante un posible inquilino insolvente.

Inquilino insolvente, problema seguro

Características de un potencial inquilino problematico

  1. Tienen prisa: Cuando alguien necesita el piso de hoy para mañana, es que algo ocurre. La mayor parte de los inquilinos solventes y «normales» o bien están en otro piso alquilados (Y deben de dar un preaviso de un mes) o es la primera vez que alquilan. En ambos casos, podrán esperar perfectamente una semana o más. Esta es una de las mayores señales de alarma, ya que pueden proceder de un desahucio anterior.
  2. Son buenos contadores de historias: En muchas ocasiones, cuentan a los propietarios historias creibles pero anormales para conseguir su objetivo. Si un desconocido te cuenta que necesita el piso con rapidez porque ya tiene contratada la mudanza, o porque se ha separado fulminantemente, o cualquier otro motivo que implique meterte presión, tómate tu tiempo para verificar la historia. Si son profesionales del impago, rápidamente añadirán complejidad a la historia principal o te presionarán apelando a tus emociones. Entonces ¡Huye!
  3. Están de acuerdo con todo: Da igual que el piso cueste el doble que el resto, o que esté en mal estado o con cualquier otro defecto. Los profesionales del impago no tienen intención de pagar más que la entrada y ya veremos si el mes en curso, por eso estarán conformes con lo que se les diga.
  4. No son solventes: Si les pedimos documentación de ingresos aportarán la propia y añadirán la de un amigo, conocido o similar, pero sabiendo que tampoco es solvente. Hay que tener en cuenta que en España hay un mínimo que no se puede embargar, y los profesionales del impago lo saben. Será habitual que no coincidan fechas de contrato, nominas……
  5. Se aprovechan de la buena fe: Siempre piden favores para entrar al piso antes de firmar porque tendrán un niño pequeño, o un familiar enfermo o cualquier otro condicionante que toda persona de bien aceptaría. Lamentablemente, hay que ser fríos y recordar que quien tenemos delante es un desconocido al que debemos confiar el cuidado de nuestra vivienda, nuestra confianza hay que ganarla con hechos, no con buenas palabras.
  6. Tantean la necesidad del propietario: Especialmente cuando el precio es más elevado de lo normal, se interesarán por el tiempo que lleva el piso vacío, o si tiene muchos gastos de comunidad, etc… todo para evaluar si el propietario está ansioso por alquilar y aprovecharse de ello.

Estos factores pueden darse en conjunto o por separado, pero siempre son una señal de alarma indicativa de que podemos estar ante un inquilino potencialmente dañino. Evidentemente, habrá casos en los que el inquilino esté diciendo la verdad, pero por desgracia, estas son unas técnicas habituales entre los inquilinos insolventes.

Es por eso que siempre puede contratar un servicio de estudio de solvencia o un seguro de impago de alquiler, para evitar posibles problemas en el futuro. Porque alquilar con seguridad es ahorrar dinero y disgustos en el futuro.

 

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies